“¡Tranquila Yolanda!. Cuando me gritas me pongo nervioso, cuando me pongo nervioso me asusto, y cuando un hombre está asustado es cuando mata a otros hombres por accidente"
Qué nos asusta? Hace 20 años, Jules, papel que interpreta Samuel L. Jackson en la película Pulp Fiction relacionaba el nerviosismo con el miedo y finalmente con el asesinato. Mientras una mitad de la población está enajenada con el inicio de clases y todos los costos que implica, con el viaje de vacaciones o las peleas entre modelos porque no son consideradas para el sambodromo más importante del país, la otra mitad se está matando,. Prácticamente, desde inicios de este 2014, hay al menos una víctima de la violencia por día, no sólo relacionada al obscuro mundo del narcotráfico, también los hay por negligencia y lo que es peor, por violencia doméstica.
Algo estamos haciendo mal para no ponernos a debatir sobre eso y sí discutir si las fotos que vemos de lo que sucede en Venezuela son realmente del país bolivariano o de otra gesta en otra época y en otro lugar del planeta. Estamos mal, estamos muy mal, seguimos recibiendo espejitos a cambio de ignorar el problema real, la negligencia no sólo es estatal, no se relaciona ya con política, esta violencia que si no se detiene nos puede consumir a todos como si estuviésemos en un apocalipsis zombie, no acabará nunca, pero al menos se pueden crear estrategias para disminuir la ola antes que se convierta en un tsunami y nos acarree a todos.
Hay un promedio de 15 denuncias semanales en Ciudad del Este y alrededores por violencia intrafamiliar, en uno de los casos concretos, la victima fatal no sólo fue la pareja, sino la hija, una niñita de 3 años de edad. La violencia de género cae tanto sobre hombres como mujeres, ya que existen denuncias que constan a las mujeres como agresoras, a finales del 2013 el número de denuncias ascendía a 300 según instituciones encargadas del tema.
No vivimos en una zona de guerra, pero semanalmente amanece un cadáver acribillado relacionado con el narcotráfico. Ya no sorprende la tapa de los principales periódicos regionales que se tiñen de un rojo tarantinesco titulando las noticias. Violencia intrafamiliar, narcotráfico, todos en la misma bolsa y nadie que se preocupe realmente. Habilitaran un centro de asistencia para las víctimas de violencia doméstica, pero en varios casos, son los mismos agentes de policía los protagonistas, atemorizando no sólo a su propia familia sino también a vecinos y parientes que quiebran el miedo y se atreven a actuar aún sin tener ninguna garantía de que alguien los protegerá en caso de represalias.
El 2014 se depara como violento si en este primer trimestre no se crean estrategias sólidas para luchar contra este flagelo, es necesario limpiar las vías de acción para garantizar justicia y seguridad, hay que volver a confiar y las instituciones deberían velar por ello.
Patricia Silva Casco es Comunicadora. Hace un poco de radio (www.1035.fm) y colabora con www.agendarte.net. Nacida en Asunción del Paraguay pero malcriada en la fronteriza Ciudad del Este.
