El congresista de UNACE, Jorge Oviedo Matto se refirió a la muerte de su adalid político, el General (SR) Lino César Oviedo Silva (69) como un patriota y el último líder del Paraguay. El Partido UNACE, que en las elecciones del 2008 obtuvo 380.000 votos, está hoy día de luto.
Admirado por muchos, de esos que creen que el país necesita de una mano dura, del tipo militar, del “shake lo mita” , de los que agradecen vivir en democracia pero piden a gritos la “seguridad” de un régimen dictatorial, donde, como dicen incluso algunos que ni estaban en planes de nacer, todo era más tranquilo, había menos robos y asesinatos en las calles. Lino Oviedo era la imagen superpuesta, era la coalición perfecta de ideales volcados en deseos, que en esencia son contradictorios, democracia y dictadura.
Un hombre con mística, al que encantaba con su porte recto, su habla pausada y tajante, sus palabras con fuerte arraigo nacionalista. Era la esperanza de los pobres y abandonados por el partido colorado, y de éstos surge la Unión Nacional de Colorados Éticos (UNACE), partido político que nació desmembrándose del tradicional partido colorado. La mayoría de sus adeptos, personas humildes que perdieron rápidamente la esperanza que había sido obsequiada aquel amanecer del 3 de febrero, hace 24 años.
La muerte de Lino Oviedo lleva muchas respuestas a preguntas que la historia paraguaya necesita responder. El enriquecimiento ilimitado, el intento de Golpe en el 96, el asesinato del Vicepresidente Luis M. Argaña y la masacre del Marzo Paraguayo en el 99. Ni héroe, ni villano; tuvo sí un papel importante en el derrocamiento de la dictadura que azotaba al Paraguay hacia 35 años, pero que en los 24 años de democracia, especialmente en épocas de campaña política, su discurso se alejaba de lo democrático para volverse un tanto fascista, un hombre que soñaba ser Presidente de la República del Paraguay y amenazaba con frases que no serán sepultadas fácilmente como aquella "Peé periodista, tataindyicha peñe alineata" (Ustedes, los periodistas, se van a alinear como velas).
A dos meses de las elecciones presidenciales, y sin siquiera enterrar al difunto, ya surge la interrogante: A quién votarán los oviedistas? Los colorados, convencidos de que los oviedistas eran, son y seguirán siendo colorados, ahora sin un líder con la carisma del fallecido Oviedo, volverán a las fauces del coloradismo para el esperado retorno al poder en abril. En cambio, las buenas relaciones entre los del UNACE y los liberales no deben pasarse por alto. Nos quedan 75 días para atestiguar está pugna.
Lino César Oviedo, que falleció en un trágico accidente aéreo, junto a su custodio Denis Galeano y el piloto Ramón Pico Delmás, en la noche del sábado 2 de febrero, cierra un capítulo de su historia en la política del Paraguay.